… fue la Virgen de la Estrella de Triana
¡ Que hermosa vas, Madre mía,
por el Puente de Triana
en la noche de los Ramos
cuando vuelves a tu casa
derramando a manos llenas
plenitudes de tu gracia!...
Al verte ¡ rosa florida!
el Guadalquivir, se para
para que escuches gozosa
el lenguaje de sus aguas
que te canta susurrante
con aires de sevillanas
-¡No hay manos, como tus manos !...
¡ Ni cara como tu cara !...
¡ Ni risa como tu risa !...
¡ Ni dolor como tus lágrimas !...
Eres lucero en la noche
que alumbra la noche en calma,
y al despuntar las auroras…
¡ Estrella de la mañana !...
Faro de luz luminosa
en el puerto de las almas.
Por el mar de los ensueños,
Destello de luna clara,
y en los íntimos silencios
del poeta, dulce llama
que da calor a sus versos
cuando en tu dolor se empapan.
¡ Eres dolor amoroso
que en tu santo amor se abrasa !...
¡ Virgencita de la Estrella
donde se mira Triana
cuando goza, cuando pena,
cuando reza y cuando canta!...
